Escribir una buena oferta de empleo es quizás uno de los pasos más importantes del proceso de selección. No importa cuán buena sea la posición, o que hagas multiposting en todas las plataformas disponibles: si no sabes vender el puesto, nadie se va a apuntar.
Por eso, en este artículo vamos a explicarte cómo escribir un buen anuncio de empleo, uno que realmente contenga un mensaje potente capaz de atraer a los candidatos mejor cualificados.
Antes de empezar a escribir el anuncio de empleo, hay un paso previo esencial: la investigación.
Para que un anuncio llame realmente la atención, no solo debe estar alineado con las expectativas de la empresa, sino también de los candidatos.
Para llevar a cabo este proceso, es recomendable dedicar algo de tiempo a hablar con los managers y responsables de área, así como con los miembros del equipo que ya están a bordo, y preguntarles cómo es su día a día, cuáles son sus funciones principales, y qué se espera de ellos.
Una vez que ya tienes toda la información que necesitas, entonces sí, ya podemos centrarnos en la redacción del anuncio de empleo.
El siguiente paso es, con los datos obtenidos durante el proceso de “investigación”, imaginar cómo debe ser el candidato o candidata ideal.
Aquí podemos aplicar los mismos principios de lo que en marketing se denomina “Buyer Persona”. ¿Cómo es y qué hace el empleado de tus sueños en ese puesto?
Este ejercicio te permitirá obtener una imagen clara de cómo será el día a día de esa persona: qué tareas ejecuta, de qué se responsabiliza, cómo se comunica con sus compañeros, cómo se organiza...
Ahora, ¿qué necesita esa persona para llevar a cabo todas esas funciones eficazmente?
¿Qué conocimientos necesita?
¿Qué habilidades necesita dominar?
¿Qué actitudes necesita tener desarrolladas?
¿Necesita haber tenido experiencia en un puesto similar?
Una vez tengas las respuestas a todas esas cuestiones, apúntalas en una lista. Ahora bien, recuerda que la mayoría de veces la candidatura perfecta no existe, así es recomendable ordenar todos esos criterios por orden de prioridad.
Esto te ayudará a reconocer qué cualidades son imprescindibles para obtener el puesto, y cuáles son negociables.
No existe una estructura estándar y universal. Sin embargo, por norma general, todas siguen un patrón parecido al siguiente:
Nombre de la posición.
Localización.
Introducción o presentación de la compañía.
Roles y responsabilidades del puesto.
Capacidades y aptitudes necesarias.
Condiciones laborales (aunque esta parte no siempre está presente).
Como decimos, no se trata de una estructura que se tenga que seguir al pie de la letra y, de hecho, una buena idea es romper con el esquema y sorprender a la persona que está leyendo. ¡Eso seguro que ayuda a captar mejor la atención!
A continuación, vamos a ver cada uno de estos puntos en profundidad, identificando todos los aspectos que debes tener en cuenta para escribir ofertas de empleo que atraigan a las mejores candidaturas.
Uno de los errores principales es poner en el anuncio el mismo nombre que consta en la Descripción de Puesto de Trabajo. Actualmente, el título de la oferta de empleo debe ser acorde a la tendencia de búsqueda para ese puesto.
Debes ponerte en la piel de los candidatos: cuando un profesional va a buscar un empleo, ¿qué pone en la barra de búsqueda? ¿qué palabras clave utiliza para obtener resultados?
Si eso te resulta complicado, una buena alternativa es utilizar los diferentes portales de empleo para averiguar cómo los demás recruiters llaman a las posiciones similares a la que estás ofertando.
De todas formas, recuerda que siempre debes utilizar un título que sea representativo del trabajo que deje claro qué es lo que se va a realizar.
Geralt Zaltman, profesor de la Harvard Business School, es uno de los grandes defensores de la teoría que explica que las personas actuamos guiados por las emociones y después, le damos una explicación lógica a lo que hemos hecho.
Siguiendo esa línea de razonamiento, esta parte de la oferta de trabajo es fundamental, porque es donde se tiene que “enamorar” al candidato que estamos buscando.
Es aquí donde pondremos todos nuestros esfuerzos para que finalmente nos deje su currículum y podamos acordar una entrevista.
¿Qué es lo que hace que trabajar contigo merezca la pena? ¿Por qué esta es una buena oportunidad? ¿Qué tiene tu proyecto que lo diferencia de los demás?
Ten en cuenta, eso sí, que debes presentarte pero tampoco excederte. Despertar el interés del candidato es fundamental, pero la oferta no debe convertirse en un monólogo sobre ti. De hecho, todo lo contrario: las mejores ofertas de trabajo están centradas en el candidato.
Este es otro de los apartados fundamentales. Antes de aplicar por el puesto, los candidatos querrán saber si las funciones se adaptan a lo que buscan y cómo será su día a día si fuesen contratados.
Se trata de un apartado 100% bidireccional: tú expones las expectativas y lo que esperas que haga la persona contratada, y el candidato sabrá si ejerciendo esa posición, podrá desarrollar y poner en práctica sus habilidades, así como una oportunidad de crecimiento.
Por ese motivo, lo mejor es evitar una lista de tareas estándar. Es frío, es aburrido, y no aporta información.
En cambio, una lista de tareas descritas de la siguiente forma es mucho más clara y aporta mucha más información:
Esta es la parte en la que se debe incluir todos aquellos elementos que escribiste en la lista del candidato ideal.
Si hay algo en esa lista que sea un requisito totalmente esencial, no dudes en ponerlo. Recuerda que la intención es encontrar al candidato o candidata mejor cualificado para el puesto. Eso sí, ten en cuenta que cuantos más criterios, menos candidaturas obtendrás.
Una buena práctica es dividir esta lista en dos partes: criterios imprescindibles, aquellos a los que les des más prioridad; y criterios “deseables”, aquellos que se sitúan en la parte más baja de la lista.
Por último, debemos explicar qué es lo que ofrecemos a cambio de los servicios. Esto debe incluir:
Horario.
Tipo de jornada.
Tipo de contrato.
Oportunidades de crecimiento.
Variables.
Horquilla salarial.
Muchas empresas son reticentes a mostrar el salario en las ofertas de empleo. Sin embargo, es un dato muy relevante que debería estar incluido por dos razones:
Ayuda a ahorrar mucho tiempo, tanto al candidato como a la persona que lleva el proceso de selección, pues desde un primer momento se sabe si la oferta interesa o no.
Desde el punto de vista del candidato, incluir el salario dice mucho de la empresa. Ofrece una visión clara de la cultura de honestidad y transparencia, lo que hace sentir que es un lugar seguro para trabajar.
Esperamos que estos consejos te ayuden a perfeccionar tu manera de escribir ofertas de empleo, atrayendo a más y mejores candidatos/as. Y si hay algo que has echado en falta, ¡no dudes en dejarnos un comentario!
Basado en:
Cowpe, A. (2021). How to write a good job advert that attracts your dream hire. CharlieHR Blog | The Workspace.
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